Es un recordatorio
un alerta
un desafío
saber que todavía
estamos vivos.
Si pudieramos desatarnos
las manos del reloj
y dejar que el sol
nos toque sin preguntarnos
el qué
el cómo
y el por qué.
Cada palabra tiene tantos significados
como estrellas en el jardín
de la noche de la inocencia
que resiste para seguir
viendo al mundo
con mirada de niño
que a veces ríe
porque es feliz
con lo mucho y con lo poco
con las dudas y la nada
con las ganas y los sueños
con las manos y la piel.
No tomes las causas por perdidas
ni guardes para mañana
lo que no supimos usar ayer.
Si hoy es siempre todavía,
y si este otro mundo
es posible
vayamos por él.
1 comentario:
Los ojos inocentes de niño, la risa cuando es verdadera, son espejos del alma. Que el reflejo sea siempre positivo, que lo que falta nunca opaque lo que tenés. Un mundo mejor siempre es posible, solo que requiere de mucho trabajo y paciencia.
Que lindo que aceptes la fórmula de vivir hoy sin guardar para mañana.
Besos miles, te amo!
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