La muerte debe ser otra cosa
que esta tormenta de silencios que te nombran,
o la agonía de despertarse a medianoche
en esta isla sin sobrevivientes ni caricias.
La muerte debe ser otra cosa
que este amontonamiento de excusas que separan
porque el orgullo no conoce de verdades
sentidas y absolutas.
La muerte debe ser otra cosa
que la torpe ironía como defensa
o esta estúpida soledad acompañada.
La muerte debe ser otra cosa
que imaginar un mundo sin vos
poblado de tus recuerdos a medida,
o la sumatoria de mis crisis irresueltas
discutiendo con tus utopías subversivas.
La muerte debe ser otra cosa
pero es tan parecida.
Era poeta; y los poetas ya se sabe que no llegan nunca a ser lo que se dice personas mayores
lunes, septiembre 12, 2011
lunes, agosto 22, 2011
palabras
Si pudiera nombrarte distraídamente
a la orilla de la chimenea
o encontrar una palabra nueva
para tocarte el alma,
Si pudiera entrar silenciosamente
en tu silencio
y llenarlo de flores y sonrisas,
Si pudiera darte mi corazón y todo
lo demás que necesitás
para que creas como la vez primera.
Si supiera ejercitar este viejo oficio
para encontrar esa palabra nueva
que te dibuje completa y feliz
como siempre quise
y pocas veces supe.
Con estas torpezas que no riman
con este intento por tocarte el alma
con estas ganas te cuento
lo que a menudo callo
cuando dormimos abrazados
y en el mundo nuestro mundo
reina esta maravillosa calma.
a la orilla de la chimenea
o encontrar una palabra nueva
para tocarte el alma,
Si pudiera entrar silenciosamente
en tu silencio
y llenarlo de flores y sonrisas,
Si pudiera darte mi corazón y todo
lo demás que necesitás
para que creas como la vez primera.
Si supiera ejercitar este viejo oficio
para encontrar esa palabra nueva
que te dibuje completa y feliz
como siempre quise
y pocas veces supe.
Con estas torpezas que no riman
con este intento por tocarte el alma
con estas ganas te cuento
lo que a menudo callo
cuando dormimos abrazados
y en el mundo nuestro mundo
reina esta maravillosa calma.
domingo, marzo 27, 2011
como te digo
No es cuestión de repetir
las mismas palabras de siempre
sólo se trata de volver
al punto de partida
para reencontrarnos una y otra vez
con las ganas de estar
con las ganas de empezar
a pesar de esta manía
de no coincidir en los silencios
de gritar indiferencia para no derribar
el último bastión de los sueños
que aún soñamos juntos
el uno con el otro
tan parecidos y tan distintos
en cierto modo.
No es cuestión de lamentar
lo que pudo haber sido
cuando queda casi todo
el infinito por jugar.
Se trata quizás de aceptar
que las distancias a veces unen
y las palabras confunden el tono.
Se trata de mirarnos como sabemos
y decirnos todo con un abrazo certero
o con un beso
tan conocido y tan nuevo.
las mismas palabras de siempre
sólo se trata de volver
al punto de partida
para reencontrarnos una y otra vez
con las ganas de estar
con las ganas de empezar
a pesar de esta manía
de no coincidir en los silencios
de gritar indiferencia para no derribar
el último bastión de los sueños
que aún soñamos juntos
el uno con el otro
tan parecidos y tan distintos
en cierto modo.
No es cuestión de lamentar
lo que pudo haber sido
cuando queda casi todo
el infinito por jugar.
Se trata quizás de aceptar
que las distancias a veces unen
y las palabras confunden el tono.
Se trata de mirarnos como sabemos
y decirnos todo con un abrazo certero
o con un beso
tan conocido y tan nuevo.
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